Miguel Hernández, hoy más que nunca
Cierto poeta escribió que «La poesía es un arma cargada de futuro»; no podía imaginar que el futuro estaba en manos de unos miserables.
Leo la noticia en Cadena Ser.com, busco su contraste en ABC.es. Lo que más me indigna es el que ese bodrio, patrocinado por el Ayuntamientode Orihuela, haya sido repartido en colegios.
La noticia me produce tanta náusea que no encuentro mejor manera para responder que reproduciendon un fragmento de cualquier poema del poeta otra vez destrozado.
(En Orihuela, su pueblo y el mío, se me
ha muerto como del rayo Ramón Sijé,
con quien tranto quería)
Yo quiero ser llorando el hortelano
de la tierra que ocupas y estercolas,
compañero del alma, tan temprano.
Alimentando lluvias, caracolas
y órganos mi dolor sin instrumento,
a las desalentadas amapolas
daré tu corazón por alimento.
Tanto dolor se agrupa en mi costado
que por doler me duele hasta el aliento.
Un manotazo duro, un golpe helado,
un hachazo invisible y homicida,
un empujón brutal te ha derribado.
La noticia en otros blogs: Mil ojos desde Xiabre, Misterios al descubierto, Pasaba por aquí, Kabila, Tengo una cansera…,
«Andaluces de Jaén,
aceituneros altivos,
decidme en el alma: ¿quién,
quién levantó los olivos?
No los levantó la nada,
ni el dinero, ni el señor,
sino la tierra callada,
el trabajo y el sudor.»
Éste, es el mejor recuerdo.
SaLiRe y Feliz Navidad. Toni Sagrel.
Cualquier poema del poeta es una buena respuesta a esta derecha tan extrema como demencial.
Saludos
Acabo de sacar un post y he coincidido contigo. Una verdadera canallada.
Salud y República
Poemas contra el ultraje. La blogosfera debería inundarse de poemas de Miguel Hernández como respuesta a los sinvergüenzas que, además, no dudan en utilizar a los escolares en sus desvaríos.
Yo también colobaro:
«… Pueblo, chorro que quieren cegar, estrangular,/ y salta ante las armas más alto más potente:/ no te estrangularán porque les faltan dedos,/ porque te basta sangre.»
Ni siquiera son unos ultras, son unos sinvergüenzas. Harto del PP hasta las narices.
«…Las armas son un signo de impotencia: los hombres/se defienden y vencen con el hueso ante todo./Mirad estas palabras donde me ahondo y dejo/fósforo emocionado.»
Como siempre, un abrazo emocionado al saber que vuelves una y otra vez.
Pues si se trata de contibuir con un poema ahí va el eligido por mi:
El niño yuntero
Carne de yugo, ha nacido
más humillado que bello,
con el cuello perseguido
por el yugo para el cuello.
Nace, como la herramienta,
a los golpes destinado,
de una tierra descontenta
y un insatifecho arado.
Entre estiércol puro y vivo
de vacas, trae a la vida
un alma color de olivo
vieja ya y encallecida.
Empieza a vivir, y empieza
a morir de punta a punta
levantando la corteza
de su madre con la yunta.
Empieza a sentir, y siente
la vida como una guerra,
y a dar fatigosamente
en los huesos de la tierra.
Contar sus años no sabe,
y ya sabe que el sudor
es una corona grave
de sal para el labrador.
Trabaja, y mientras trabaja
masculinamente serio,
se unge de lluvia y se alhaja
de carne de cementerio.
A fuerza de golpes, fuerte,
y a fuerza de sol, bruñido,
con una ambición de muerte
despedaza un pan reñido.
Cada nuevo día es
más raíz, menos criatura,
que escucha bajo sus pies
la voz de la sepurtura.
Y como raíz se hunde
en la tierra lentamente
para que la tierra inunde
de paz y panes su frente.
Me duele este niño hambriento
como una grandiosa espina,
y su vivir ceniciento
resuelve mi alma de encina.
Le veo arar los rastrojos,
y devorar un mendrugo,
u declarar con los ojos
que por qué es carne de yugo.
Me da su arado en el pecho,
y su vida en la garganta,
y sufro viendo el barbecho
tan grande bajo su planta.
¿Quién salvará a este chiquillo
menor que un grano de avena?
¿De dónde saldrá el martillo
verdugo de esta cadena?
Que salga del corazón
de los hombres jornaleros,
que antes de ser hombres son
y han sido niños yunteros.
Miguel Hernandez
Salud, República y Socialismo
No conocía el hecho de que este poema ha sido repartido en los colégios. Patético.
Por el resto creo que al autor le ampara la libertad de expresión excepto en un punto: La acusación de asesino que vierte contra Carrillo. Una administración pública puede permitir presentaciones en sus instalaciones de cualquier autor de cualquier ideología, pero la acusación sin pruebas y la calumnia no puede ser acogida.
Para comenzar un gran proyecto, hace falta valentía. Para acabar un gran proyecto, hace falta perseverancia.
Feliz Navidad. Bon Nadal.
Hola me encanta vuestro blog, si queréis os añado a mis enlaces favoritos en mi web y vosotros me añadís a mi, saludos y gracias por la información que a diario ponéis en la web, nos vemos!!
http://hoysecumplen.com
Lo supe por Felipe «elizquierdista» busqué la información y la publiqué en mi página antesdeayer, o sea… el sábado, salvo que me confunda ¡claro! -pongo esto porque tu «entrada» es del 23, miércoles-.
Despreciable la forma en que La Derecha… Los de Siempre… La Mano que No Suelta Nuestro Cuello… PERVIERTE las palabras, en este caso las de Miguel Hdez.
Mas besos y… parece que muchos -o algunos- de los que visito desde el inicio pasan/pasamos por una crisis de «ausencia de escritura». Faltan deseos de escribir… se acaban las ganas…
Conviene revisar si esto se amplía -afecta también- al resto de nuestro espectro vital ¿?
Y ahora, un abrazo fuerte, de verdad: PAQUITA