El obispo de Córdoba
Nada que objetar cuando la Iglesia Católica se postula contra el aborto, la homosexualidad o el uso del condón; está en su derecho de orientar en el sentido que lo estimen. Otra cosa es la coherencia que profesan y la relación del verbo con los hechos de sus apóstoles, vicarios y prelados.
Supongo que todas las religiones serán similares pero, quizá por próxima, la católica tiene algo especial. Alardea de estar perseguida por un Estado que la financia generosamente y le otorga un trato de privilegio. Desde sus púlpitos proclaman estar perseguidos y acorralados, editando una y otra vez un apocalipsis de bolsillo que destila un hedor vetusto y rancio. Es cierto que el integrismo, ese «tétrico ropaje con el que se viste la ignorancia», no es exclusivo de la religión, pero hay altos representantes de ésta que lanzan proclamas dignas del fanático más necio, del integrismo más soez. Ignoro si tanta carcunda y desatino son consecuencias del boato, del incienso o del boniato.
Estas palabras pertenecen a un escrito de Demetrio Fernández, obispo de Córdoba, que fueron leídas como homilía recientemente. Orgulloso del dislate, este señor pone el texto en la Red para que leamos semejante ingenio. A la vista del espectáculo, uno debería pensar que esto es sólo el desvarío de un iluminado. Lo malo, que con éstas y otras similares, la Iglesia Católica se alumbra desde hace dos mil años.
Desconozco cuánto sabe este señor de los planes de la Unesco o sobre la homosexualidad, pero se manifiesta como un ignorante en los estudios de género. Sin embargo, conocemos algunas de las prácticas que la jerarquía eclesiástica ha ido ocultando bajo sotana o cómo han gestionado, Cajasur por ejemplo, quienes tanto gustan hablar de la pobreza, austeridad y de la dificultad de los ricos para entrar en el reino de los cielos. El señor obispo de Córdoba debería saber que la ignorancia
Nietzsche proclamó la muerte de Dios, Hawking acaba de decretar la muerte de la filosofía; lamentablemente nadie anunció aún la muerte de la necedad, tampoco del fanatismo.
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14 de abril 
El fanatismo va ligado exclusivamente al bolsillo. Con otros tipos de familias y otros hábitos ven peligrar sus ingentes ingresos, no les basta la financiación oficial. Es cierto que dedican mucho a obras sociales pero tembién es cierto que tienen que seguir manteniendo la principal fuente de ingresos ideológicos: sus centros educativos.
ya sabes que a la jararquía eclesíastica le mueve tanto el negocio económico como el negocio de las conciencias.
Y si yo lo sé… ¿Por qué no quieren saberlo tantos millones de incautos fanáticos?
Esa es una pregunta que nos hacemos muchos. Pero debe haber más que o bien ese tema no les preocupa o están encantados con ser el eslabón necesario para el mantenimiento de la situación. Como sabes en Andalucía para conseguir que un niño/a entrara en determinados colegios concertados, las familias falsificaban empadronamientos o simulaban divorcios y separaciones, entre otras artimañas. ¿Escuchaste alguna vez a las autoridades eclesiásticas reconvenir a esas familias por recurrir a esas falsificaciones? ¿No hablan de la mentira como pecado? Cuando se trata de ampliar el rebaño y engordar las cuentas, la mentira ya no es pecado sino la obligación a la que las familias están obligadas a recurrir ante el acoso y persecución a que son sometidas.
La cara dura de esta tropa es impresionante, ¿por qué no hablan menos y predican de verdad con el ejemplo? Más de dos mil años dando la vara, siempre con la misma cantinela, oponiéndose a cualquier avance social, descubrimiento científico, o signo de progreso, por insignificante que sea. Si por ellos fuera, volveríamos a la Edad Media, o la época más reciente de la dictadura Franquista, en la que tan cómodos se sintieron mangoneándolo todo e instaurando un estado teocrático virtual que es, seguramente, a lo que de verdad aspiran. A ver si acepta Rouco la invitación de la CRMH y visita las fosas comunes Gallegas en las que yacen muchísimos españoles que ellos ayudaron a silenciar.
http://www.publico.es/especiales/memoriapublica/355077/rouco-varela-invitado-a-visitar-las-fosas-comunes-de-galicia
Nombra Juan Pedro al franquismo y alude a las fosas comunes gallegas. No se hagan ilusiones; estos señores no ayudarán más que a los suyos. Como bien saben, los antecesores de estos obispos pasearon bajo palio al dictador y los actuales, consienten y bendicen que un criminal de guerra como Queipo de Llano conserve sepultura en la sevillana Basílica de la Macarena. Ya ven, mientras que unos aún son buscados en las cunetas, otros encuentran cobijo en los templos del catolicismo.
A fin de cuentas, mejor compaginar la carne con el pescado. En la variación está el gusto.
Y por lo que se publica en la prensa, bien que saben los eclesiásticos de las diferencias del pescado y la carne. Pero, amigo Nicolás, tendríamos que recordarles a estos señores aquello de:»pezqueñines, no gracias».