Los blogs también son para el verano

Si es verano y estás de vacaciones se supone que es un tiempo propicio para postear con más sosiego o para contemplar el panorama de la actualidad desde otra perspectiva. Los enfados y las indignaciones, mejor dejarlos para los precios en cualquier terraza, algún chiringuito de playa o para esos especuladores que siguen ahí, donde siempre. Si es verano y hay olimpiada, piensas que es buena ocasión para escribir menos de política y más de otras cuestiones interesantes, espíritu olímpico incluido, por cierto ¿quién lo mató? También puedes hacerlo sobre un día de playa o sobre unos conciertos de jazz. Si por ser verano, piensas que hay menos noticias sobre las que dejar tu opinión, si crees que los políticos están de vacaciones, los periódicos aliviados y la actualidad sesteando, entonces realmente ¡tú, sí que estás de vacaciones!, porque no hay día sin sobresalto o sin políticos de guardia dispuestos a ofrecernos un argumentario de lo más variado y convulso o periódicos empeñados en actuar de justicieros del inmundo mundial.

Si es verano y piensas que los blogs están tumbados al sol, te equivocas. La actividad no cesa y si lo deseas acompáñanos en este vistazo a la blogosfera.

Si Rusia y Georgia hacen la guerra o se produce un golpe de estado, ya sabemos que habrá alguna bitácora atenta, como lo han estado al penúltimo golpe mojigato del mal llamado Il Cavalieri que es desnudado por tapar una teta. Y es que las calores reblandecen las entendederas y, en cualquier época, siempre hay una pléyade de orates que se autoproclaman cancerberos de la moral y la estulticia, que igual les da por censurar un vídeo por insinuar un pezón que ven en el simpático vídeo del ecologismo verde un corto porno en vez de una campaña proteccionista e imaginativa.

También, y acaso aprovechando que es verano, los siempre vigilantes de la libertad de expresión parecen que han decidido cerrar Voltairenet.org una web de información alternativa y siempre hay un blog atento para denunciar el atropello y sacarnos del error al que nos conduce el not found del enlace. Y es que, ¡nos quieren tanto!, que ya se cuidan de guiarnos por las sendas del pensamiento único, correcto y adecuado.

Aquí, por estos lares, muchos siguen creyendo que el «sector de la construcción» son los albañiles y nada más, aunque el panorama es desalentador despedir no es la solución como afirma Marc Vidal. Mientras tanto, esperamos que nuestros políticos recuperen fuerzas para afrontar las dificultades y confiamos que el Gobierno esté preparando una agenda para septiembre. En cuestión de prioridades, sin embargo, hay quien optará por salir al rescate de las empresas del ladrillo antes que por nuestras maltrechas economías de ciudadanos asalariados, en paro y cautivos de la inflación, de los intereses del gran capital y de los grandes datos macroeconómicos.

Carmen Sánchez Carazo tiene el acierto de enlazarnos dos magníficos artículos publicados en El País: Iglesia, Eutanasia y libertad, sobre el derecho a una muerte digna, que Salvador Paniker dedica al doctor Montes, y el escrito por Vicenç Navarro en el que nos explica por qué la salud es de pago en EEUU. Luis Solana y Ramón Cotarelo nos sitúan las coordenadas exactas de ese malnacido conocido por De Juana y que también tiene amparo constitucional, el amigo Rafa nos advierte de la presencia del juez Calatayud y Juanjo nos ofrece una magnífica metáfora de la importancia de la imagen.

Alexandr Solzhenitsin tiene su espacio y el humor nos llega con otra, entre comillas, cierta literatura de lujo. Mientras tanto, la descalificación como un indicio claro de mediocridad, nos ocupa más de lo que merece; Rosa Díez o Joan Puig nos recuerdan que el insulto es el recurso de la impotencia.

Pero es verano; algunos blogs también veranean y otros aprovechan la estación para llevarnos a otros lugares. La bloguera más activa, aprovecha que los niños pequeños están de vacaciones y van al cine, que las niñas ya no quieren ser princesa o que ella no se pone morena para escribir, para no dejar de escribir y para escribir en todos los blogs.

Como es verano de olimpiada, entonces es buena ocasión para escribir una carta a Hu Jintao o para sorprendernos cuando De la Vega recomienda a nuestros deportistas a no manifestarse políticamente y, aunque los amigos de Bitácoras.com nos ofrezcan su particular especial olimpiadas, no deja de ser ocasión propicia para, en dos palabras, plantear un boicot ante tanta hipocresía olímpica y por mucho que hayamos podido disfrutar con la ceremonia de apertura, hay demasiadas razones para exclamar: «¡A la mierda el espíritu olímpico!«.

Al final, entre caminar o correr, uno decide leer sus blogs favoritos, escribir como buenamente puede y disfrutar del verano de la mejor manera posible. Particularmente, entre otras actividades, escucho algo de jazz sabiendo que también los blogs son para el verano y que pronto llegará septiembre.