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Rodríguez Ibarra, el xenófobo

22 septiembre 2009

Lo escucho en la radio, reconozco su voz. Quiero pensar que se trata de un buen imitador, pero… Este veterano líder socialista, ahora que surgen voces cuestionando la edad de la gente que acompaña a Zapatero, toma la palabra y consigue hacerme dudar si sigo siendo de los nuestros.    

Juan Carlos Rodríguez Ibarra, ha reclamado de Zapatero una «sanidad para españoles y sólo para los españoles». ¿Qué diríamos si estas palabras las hubiera dicho, por poner un ejemplo, Mayor Oreja?

Uno de los grandes avances que justifica los años del PSOE en el Gobierno es precisamente en el terreno sanitario. La Ley General de Sanidad (14/1986, de 25 de abril) universalizó la atención sanitaria a todos los españoles y  a los ciudadanos extranjeros con residencia establecida en territorio nacional. En la misma Ley, y en referencia a los extranjeros no residentes, se especifica que tendrán garantizado tal derecho en la forma que las leyes y convenios internacionales establezcan. Trinidad Jiménez, ha puntualizado que existen convenios en materia de Seguridad Social, en los que está «perfectamente regulada y tasada la cantidad que cada país percibe en función del número de ciudadanos procedentes de otros países». Igual Juan Carlos Rodríguez Ibarra  está proponiendo un cambio constitucional para que convertir los derechos y deberes de los ciudadanos en derechos y deberes de los españoles. 

Este argumento populista, insolidario y xenófobo, propio de cualquier Le Pen, debería ser impropio de alguien que se define como socialista. Si hoy se pide actuar contra el extranjero, ¿a quién se propondrá dejar fuera de cobertura en la próxima? Que tiemblen los desempleados o quienes carecen de recursos. 

Post publicado en dia@dia.net

14 comentarios leave one →
  1. 22 septiembre 2009 9:56 am

    Pues sí, Ibarra tiene una vena populista que utiliza de vez en cuando y que lo hace con fervor, pues se cree en posesión de la verdad y por encima de partidos e instituciones. Le da igual, de vez en cuando encuentra su bálsamo de Fierbrás. Un iluminado populista que según sus últimas declaraciones es también xenófobo.

    Salud y República

  2. 22 septiembre 2009 10:01 am

    Salud

    Se fue a la porra. Y con todo. No se me ocurre poca cosa más mezquina que negar la sanidad a una persona por no ser española. Eso es pura xenofobia de la más básica, primero la salud de los españoles, por el hecho de ser españoles, a ese que lleva trabajando nueve años en España ni pan. Por no hablar que a los ciudadanos de la UE se les debe tratar como españoles (y son los que «vienen» a hacer «turismo sanitario», muchas veces de pago, no en la SS).

    Recuerdo que hace unos meses salió esta polémica con unas declaraciones de un inefable de la derecha, que decía que los extranjeros copaban los servicios, sobre todo de urgencia, y los datos (esos incómodos datos) insisten en que el uso de los servicios de salud está muy por debajo de la media en los colectivos inmigrantes (sea por desconocimiento o por el arco de edad que cubren, en tanto que los usuarios preferentes de los servicios de salud son las personas mayores, por cuestiones obvias y crónicas).

    Hasta luego.

  3. 22 septiembre 2009 12:26 pm

    Si este señor es socialista yo soy ingeniero de minas. No, nunca lo fue. Y lo curioso es que es absolutamente cierto que ha hecho cosas estupendas en todos sus años al frente de la Junta de Extremadura, pero parece más que fueron realizadas con afán de héroe liberador que con conciencia ideológica.

    Un tipo extraño, sin duda. ¿Y populista? De esos es que tenemos muchos, por todas partes…

  4. Tersites permalink
    22 septiembre 2009 5:01 pm

    La ultraderecha y la izquierda comparten parte de su discurso. Con mucha facilidad se solapan.
    Los sindicatos UGT y CC.OO. presionarion para que ZP aprobara la moratoria contra los trabajadores rumanos y búlgaros. Los sindicatos siempre presionan discretamente para que se reduzcan los cupos, y la UGT de Sevilla ha sacado incluso la «preferencia nacional» para los trabajadores españoles.
    Corbacho ha utilizado un argumento parecido al de Ibarra. Congeló las reagrupaciones familiares porque la sanidad públida y solidaria no podía soportarlo.
    Ahí se ve la falsedad del estado del bienestar. Nos quitan la mitad del dinero en nombre de la solidaridad y la justicia social. Pero cuando llegan los pobres extranjeros a trabajar, los echan a patadas.

  5. 22 septiembre 2009 6:25 pm

    El turismo sanitario lo utilizan los turistas o residentes ingleses y alemanes en las zonas turísticas de la Costa del Sol, El Levante, Canarias y Baleares; de ninguna manera un inmigrante. Sí así fuera yo, que estuve unos meses trabajando en un hotel en una ciudad inglesa durante unos meses, si me fuera puesto enfermo, tampoco tendría derecho a que me atendieran.

    Aunque a mí me gusta este veterano socialista porque dice las cosas claras y habla con claridad y desparpajo; hay ocasiones como ésta, entre algunas otras, en las que me deja totalmente desconcertado. ¿Cómo puede decir una cosa así, hombre? Supongo que será la edad y mucho tiempo libre.

  6. 22 septiembre 2009 6:51 pm

    Cuando un político está jubilado dice cosas que jamás se atrevería a decir en activo.

    De todos modos voy a hacer de abogado del diablo y voy a defender parcialmente a Ibarra. Ibarra es un guerrista, es decir, teóricamente está en la parte izquierda del PSOE (aunque no tan izquierda como la izquierda socialista). Estos guerristas tienen un cordón umbilical más fuerte con los sindicatos que los «renovadores».
    Todos sabemos que las clases más bajas están teniendo muchas veces problemas para acceder a las ayudas sociales porque los inmigrantes, más pobres que ello, acaparan buena parte. Esto crea un cierto sentimiento de competitividad entre «pobres», que se tienen que pelear por las pocas ayudas sociales que da un estado como el nuestro.
    Esta situación crea un cierto sentimiento de xenofobia entre mucha gente, aunque sea gente que siempre se ha considerado socialista o comunista. Y esto es algo que no sólo pasa en España. En Francia, por ejemplo, el partido de Le pen tiene sus feudos donde antes el partido comunista era fuerte.

    Muchos llaman a esta situación el engaño de los pobres, porque se dedican a pelearse y tener rencillas entre ellos en vez de focalizar su rabia contra los poderosos que les llevan a tener que depender de estas débiles ayudas sociales. Sin embargo estos sentimientos xenófobos son una realidad.

    Ibarra, ya jubilado y despreocupado, ha focalizado en el terreno de la sanidad esta xenofobia que es frecuente entre mucha gente por otras causas, quizá dejándose llevar por cierto populismo y medias verdades que se comentan por ahí.
    Pero creo que éllo ha dicho como «socialista», es decir, como persona próxima a los trabajadores, no como un vejestorio reaccionario. Quizá no haya estado acertado, pero no creo que lo diga con mala fe.

    Un saludo.

  7. 22 septiembre 2009 7:38 pm

    Dijo Rajoy aprovechando la coyuntura: «si yo digo esto…»

  8. 22 septiembre 2009 10:52 pm

    Si Rodríguez Ibarra piensa lo que ha dicho, ¿que hace en el PSOE?

  9. 23 septiembre 2009 7:54 am

    Poco tendría que apostillar a los comentarios que habéis dejado, si acaso volver a lamentar una vez más esta declaraciones y desear una rectificación.

    Jomra, si dejé tu comentario anterior sin respuesta es por considerarlo muy interesante y, porque no coincidiendo con el mismo, dejándolo así se deja abierto el tema.

    Tersites, como comprenderás no comparto esa equivalencia que estableces entre la «ultraderecha y la izquierda» porque aunque en la izquierda se puedan dar situaciones como la descrita en el post, la reacción que se produce en la propia izquierda es radicalmente diferente al que se produce en otros espacios. Un ejemplo lo tienes en elos comentarios. Todos los que nos hemos expresado somos peronas de izquierdas y todos lamentamos palabras como las dichas por Ibarra. El Gobierno, por meido de Trinidad Jiménez, también salió a replicar con datos la falsedad de este ataque xenófobo. Por cierto, algún caso como el de UGT Sevilla también fue aboraddo en este blog y en el mismo sentido crítico. Saludos

  10. pelaez2 permalink
    23 septiembre 2009 9:03 am

    Pues lo siento. Pero absolutamente de acuerdo con el señor Rodriguez Ibarra. Y ademas, tambien con los sindicatos cuando pretenden poner un poco de cordura y sentido comun al fenomeno migratorio. Aquel inmigrante legal y por tanto «ciudadano», tiene todos los derechos, pero, o se restringe y encauza de alguna manera el derecho «universal» a la sanidad publica, a la educacion publica o el efecto va a ser el contrario del que pretendemos: lo publico se hundirá y se convertira en el nuevo nicho de negocio del capitalismo.

    Que el capitalismo utiliza la inmigración como ariete contra los derechos y salarios de los trabajadores es algo que no se puede negar. Que, ademas, se aprovecha de la buena fe de la izquierda y de sus principios de solidaridad universal, tampoco.

    Por ello hay que hacer el analisis correcto y tomar las decisiones oportunas, aunque sean aparentemente contradictorias con nuestro pensamiento ideal.

    Esto es asi, y el que no lo quiera ver camina hacia el suicidio. Luego lo lamentaremos.

  11. Tersites permalink
    23 septiembre 2009 1:05 pm

    La solidaridad y la justicia social debe favorecer a los más pobres, es decir, a los trabajadores del tercer mundo.No vale quitar el dinero en nombre de la solidaridad para luego negárselo a los pobres de verdad, y que se quede en el bolsillo de los afiliados sindicales, o de los favorecidos por el PSOE.

    O bien creamos un sistema sanitario solidario que les incluya a ellos, o lo privatizamos todo y nos entregamos al capitalismo.
    Es más justo un sistema capitalista que incluya a los inmigrantes, que un sistema del bienestar que necesite prohibir o restringir la libertad de trabajo de los extranjeros.

  12. 23 septiembre 2009 2:40 pm

    Totalmente de cuerdo en que «la solidaridad y la justicia social debe favorecer a los más pobres, es decir, a los trabajadores del tercer mundo.No vale quitar el dinero en nombre de la solidaridad para luego negárselo a los pobres de verdad», para pasar a los bolsillos de la Iglesia y las grandes empresas.

  13. Tersites permalink
    23 septiembre 2009 6:22 pm

    Sí, claro. La Iglesia, las grandes empresas (ahora bancos y automovilísticas), los sindicatos. Son muchos los parásitos, grupos con influencia política que chupan del bote

  14. placaceemerito permalink
    24 septiembre 2009 9:50 am

    Como siempre podemos interpretar las palabras como lo consideremos oportuno, pero para quienes defendemos lo público desde hace años, ya sabemos el mejor sistema para cargárselo, abrirlo de tal manera que al caer la calidad asistencial la MAYORÍA y digo la MAYORÍA de la gente a la que defendemos les perjudicamos. Hay que poner límites al turismo sanitario. Guste o no Guste existe y diga lo que diga la ministra existe. Esto lo conocen todos los profesionales de la sanidad pública. Hay que poner límites, justos y adecuados, pues de lo contrario el final del sistema nacional de la Seguridad social lo tenemos aquí. La demagogia es bonita y barata, pero no sirve para nada. La Izquierda tiene que poner los límites. La derecha no quiere límites, simplemente elimina lo público. Será desde la izquierda y desde los sindicatos desde donde debe debatirse este asunto, debatir es dar opiniones y rebatirlas desde el respeto.
    Salud

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